miércoles, 4 de mayo de 2011

CARTAS DESDE PRISIÓN

Las cartas de Enrique Martínez llegaron a su familia gracias al peluquero del penal, que las pasaba camufladas en el interior del maletín en que portaba su instrumental.
A continuación, la transcripción de la segunda carta, escrita pocos días después de la primera:

Querido hijo: Me encuentro bien y hoy al recibir tu carta por mano del maestro peluquero, me das una inyección de optimismo muy grande en esto que me dices.
Desde luego, procura hablar con Don José Brotons por medio de su meritorio compañero mío Don Miguel Gutiérrez. Para esto puedes ir a la Muralla del mar (me parece que es el nº 7) pregunta o di que vas a Sanidad a ver a Don José Brotons y de esta forma lo verás y entonces le explicas la papeleta.
Sobre lo de Don Leandro, dile de mi parte que no lo deje de la mano y que me extraña mucho, no le hayan citado, pues di su nombre lo mismo que el del fogonero Madrid, dile que haga ese certificado y vea el modo de que llegue a manos del Sr. Juez que es, Don José María Mena.
Pedro Cerezuela y yo, estamos juntos, dormimos uno al lado de otro, así es que estamos al corriente de todo.
Sin más por hoy un abrazo de tu padre que te quiere
Enrique
Todavía no nombré a defensor por tener que elevarse a plenario mi causa y tan pronto lo hagan, me lo comunicará el Juez. Por esto, quiero que veas y hables a Dn José Brotons por si él quisiera serlo en caso de nombrarlo yo. En caso contrario, he pensado en un alférez de Infª de Marina, que se llama Don Joaquín Montaner Delgado que dicen que es bueno. Yo no lo conozco.